Los cargos por drogas en Texas pueden tener consecuencias graves que pueden alterar la vida, incluso para quienes infringen por primera vez. Desde la simple posesión de marihuana hasta los cargos por delitos graves relacionados con sustancias controladas, las sanciones pueden incluir penas de cárcel, multas elevadas, pérdida de empleo y antecedentes penales permanentes. Hay mucho en juego y su defensa debe manejarse con precisión.
Ray Vázquez aporta años de experiencia de ambos lados de la sala del tribunal a cada caso de drogas que maneja. Como exoficial de policía y fiscal del condado de Harris, comprende cómo se investigan, presentan y procesan los cargos por drogas. Ya sea que se trate de una parada de tráfico que desemboque en un cargo por posesión o de una investigación más amplia sobre la distribución o el tráfico, Ray sabe dónde encontrar puntos débiles en el caso del estado, ya sea en el registro y la incautación, en las pruebas de laboratorio o en los errores de procedimiento.
La diferencia entre una condena y un despido a menudo radica en los detalles. Ray examina meticulosamente cada aspecto del arresto, desde cómo se recopilaron las pruebas hasta si se violaron sus derechos constitucionales. Ha defendido a clientes de cargos relacionados con marihuana, cocaína, metanfetaminas, medicamentos recetados y más, y elabora estrategias legales adaptadas a los hechos de cada caso.
Cada cliente merece una defensa sólida y una segunda oportunidad. Ray se centra no solo en minimizar las consecuencias legales, sino también en buscar opciones de impacto a largo plazo, como programas de desvío, alternativas de tratamiento o la desestimación de casos cuando sea posible. Si usted o un ser querido ha sido acusado de un delito relacionado con las drogas en Texas, confíe en un abogado defensor que sepa cómo defenderse de manera efectiva y ética.
¡Palabras sinceras de aquellos que han estado donde tú estás y han salido victoriosos!
«Doy gracias a Dios por ponerte en mi vida. Si tuviera otro abogado, tendría un número TDCJ ahora mismo... No estaría aquí con mi familia sin ti. Estoy sobrio, en mi propia casa, me va bien en libertad condicional. Dios los bendiga a usted y a su familia».
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